PRESENTACIÓN
"Los estudios artísticos se instalan en la revisión crítica y en la investigación de las concepciones y prácticas acerca del arte, que soportan la estructura del mundo del arte y sus circuitos en el contexto colombiano, latinoamericano y global. Se propone el estudio de desplazamientos teóricos y prácticos que históricamente son consecuencia de la enseñanza del arte basada en los pilares del esquema hegemónico tradicional: historia, obra y artista que, por lo general, equivale a mantener una formación altamente descontextualizada y mecanicista, con pocas preocupaciones por el vínculo y el ejercicio social de la profesión y reducida proyección de ámbitos laborales. En esta línea de investigación, la Maestría busca pensar, desde la academia, los vínculos sociales que se presentan actualmente entre las artes y las culturas" (año, página).
La crítica a aquella rigidez de los pilares que constituyen la base hegemónica de enseñanza y praxis de un “arte tradicional”pueda que constituya el eje centraldecada una de las propuestas de Estudios Artísticos en esta Maestría. En ese sentido, la presente propuesta de Investigación-Creación se enfoca hacia una comprensión del mundo a través de mi vivencia y experiencia de desplazamiento encajado en un sinnúmero de conexiones tanto materiales como inmateriales ligadas a la casa paterna-materna como el núcleo de origendel que se desprende la mayor parte de elementos y valores seleccionados para la composición de este proyecto.
Ahora bien, algunos de los enunciados que componen la línea de Estudios Artísticos podrán encontrarse cristalizados en el transcurso de esta propuesta investigativa-creativa, la cual se anuda por medio de las artes visuales y específicamente el dibujo como lugares de enunciación y de apuesta por el trazo nuevas rutaspara el establecimiento de formas otras de viaje y conquistas de nuevos territorios no solamente dentro de una geografía, temporalidad, arte y, o memorias convencionalmente definidas por la academia, sino también dentro de ámbitos y definiciones no convencionales delo que puede ser el ser humano, presentes en el sentir, el pensar y actuar de la gente provinciana.
Entonces como condición de desplazamientoy movimiento humano, el viajecompone el eje central para el desarrollo del problema tratado, el cual, particularizado por una serie de movimientos específicosligadosami vivencia y experiencia del mismo, recibe otra denominación; sus particularidades tejidas a mi vivencia y afección en relación a los entornos habitados y afectado tras mi paso, recibe el nombre de Andada, palabra que literalmente alude a una huella de caza (Word reference , 2013), que al ser adaptada como vehículo en la asociación e indagación de la corporeidad como complejo tejido que me entrelaza de manera íntegra y trascendental al mundo de forma espacial, temporal, afectiva, relacional, reciproca, arquitectónica, natural, permite componer la idea de una integridad cuerpo-mundo, a través de las condiciones que presta la andada como posibilidad de camino, caminante y manera de caminar.
Laandadatiene relación con su definición literal y es adaptada al proyecto como forma particular de viaje a partir de la propia vivencia (que vendría siendo la representación de la huella)y cuyo punto de origen y destino están comprendidos en mi caso, entre lo el pueblo de Las Mesas Nariño y la ciudad de Bogotá Colombia.
Dentro de la andada, la noción de cuerpo se circunscribe en su relación con el mundo y con una variedad de entornos habitados a partir y a través del desplazamiento, en una serie de experiencias que motivan el enriquecimiento de un conjunto de valores tejidos a su estructura a manera de recuerdos, vivencias, conexiones y experiencias.
A partir de mi vivencia y experiencia de mundo por medio de la andada, experimento, siento, pienso, interpreto, actúo, y me construyo como ser humano en un muy complejo tejido que Según Alicia Esther Grasso: Licenciada en Actividad Física y Deportes de la Universidad de Flores, trasciende los límites de la presencia y de la ausencia en la corporeidad que ella define como:
"La integración permanente de múltiples factores que constituyen una única entidad. Factores psíquico, físico, espiritual, motriz, afectivo, social e intelectual constituyentes de la entidad original, única, sorprendente y exclusiva que es el ser humano: Soy yo y todo aquello en lo que me corporizo, todo lo que me identifica. Nuestra corporeidad está presente aún cuando nosotros no lo estamos físicamente: un elemento de nuestra corporeidad como una carta escrita con nuestra letra, un reloj pulsera usado cotidianamente, el gesto de arquear una ceja que heredó un hijo, la frase de cariño que nos distingue, una foto o película con nuestra imagen, nos corporizan en el otro aún después de muertos." (Grasso, 2008)
Entonces, la andada, se presenta como una propuesta investigativo-creativa que a partir de algunos elementos tomados y adaptados de disciplinas tales como la auto-etnografía, la fenomenología, la antropología y otras ramas especificas de las ciencias sociales y humanas,puededireccionarsehacia una configuración de posibles maneras-otras de desplazamiento, que se despliegan a través de la unificación deideas y experiencias personales; conceptos históricos y fuentes bibliográficas; narrativas provenientes de personas comunes y corrientes poseedoras de objetos, oralidades, gestualidades, experiencias y saberes; en una alternativa de comprensión y configuración artística de las particularidad de cada uno de los pueblos y ciudades.
La idea anterior también permite presentar la andadacomola metodología central aplicada a este proyecto, la cual, asociada a la triangulación de la perspectiva personal, vivencial y experiencial; histórica o bibliográfica y la de los saberes otros que componen mi entorno; permite configurar creativa, artística y conceptualmente nociones deunacorporeidaden relación a un tejidoíntegrodel ser humano con el mundo, que en este caso explora, vive, reconoce y apropia a través del desplazamiento.
Entonces, siguiendo el rumbo conceptual de este trazo investigativo-creativo, también podré afirmar que la causa principal para el establecimiento de la andada como problema y camino posible de investigación-creación tiene su origen en y desde mi condición, mi encuentro y mi vivencia de desplazamientosque se fueron generando por razones y problemas familiares de índole social y económica tales como: el desempleo y la pobreza familiar vividos durante el transcurso de nuestras vidas y traducidos en una serie de viajes colectivos por vía terrestre y fluvial a los pueblos de Puerto Guzmán Putumayo, Villa Garzón Putumayo, Mocoa Putumayo y MiraflorCauca;y problemas personales, íntimos y académicos en relación a mi interés por estudiar las artes visuales en ciudades como Pasto Nariño desde el año 1999 hasta el años 2005 y en Bogotá desde el año 2007 hasta el día de hoy.
Estos desplazamiento fueron acarreando una serie de consecuencias traducidas en una amplia gama de condiciones humanas que he a través del desarrollo de este proyecto he ido enmarcando en ideas sobre el problema general de la pérdidacomoelequivalente al desarraigo tanto provincial como familiar, objetual, topográfico, paisajístico, humano,pero también a una nostalgia que como bien la describe Andreas Huyssen, está compuesta "por nostos(hogar) y algía(pérdida, deseo)que remite a la irreversibilidad del tiempo" (Huyssen, 2011), la cual viene encarnada en la propuesta de andada como herramienta fundamental en el estudio de las conexiones que me mantienen entrelazado de unas a otras espacialidades y temporalidades.
Por tanto, en el sentido de conexiones entre lugares dejados, evocados, metaforizados y habitados, el retorno se instala como cualidad propia de la andada que trasla idea literal de una huella de cazaadaptada ahora a una huella de casa, inscribe la tierra natal y específicamente el hogarcomo el lugar buscado ypróximo al que desde la lejanía se puede llegar, el retorno se presenta entonces como un camino de configuración conceptual y artística en y desde la andada.
Represento mi cuerpo como un complejo organismo compuesto por diversos tipos de movimiento, por medio de los cuales se mantiene en continua transformación, y sujeto a un complejo tejido con el mundo. Desde su circulación sanguínea, al multitudinario viaje del espermatozoide y el óvulo; desde su impulso nervioso que se traslada como la luz a aquel lugar donde se transforma en sensación, precepto e ideas: una “máquina” de la imaginación, el deseo y la lógica; desde la chispa emotiva que combustiona la articulación de las piernas y los pasos, a los muchos metros de uña y cabello que emergen fundiéndose al mundo en pequeños fragmentos que se van cortando; desde los muchos kilos de piel que han pasado por el sifón al mundo de la alcantarilla junto a toneladas de comida y bebida transfiguradas en desecho, a cada una de las huellas de mis zapatos. Así, pues, asocio mi cuerpo a una condición de aquí y allá, un ahora, un antes y un después, “a un cuerpo objeto y a un cuerpo psíquico, al cuerpo ”(Ricoeur, 2010, pág. 546).
También, asocio mi cuerpo al “viaje”, como condición integral de translación, la cual agrupa entre otras posibilidades: salidas, llegadas, encuentros, lugares, temporalidades, sentires, fantasmas, personas, conocimientos, fantasías, conexiones, deseos, miedos, exclusión, peligro y un mundo circunscrito por el entramado de caminos posibles que se funden al viajero como persona que recorre el espacio y el tiempo a través del movimiento.
Le asocio alaandadacomo fundamento teórico, experiencial y artístico imprescindible en la constitución de mi búsqueda investigativa-creativa, la cual tiene su origen en un lugar específico llamado: mi “tierra natal”, entendida en sudimensión geopolítica y emocional, comopunto de partida y llegada, de encuentro y desencuentro, de indagación y de respuesta. La “tierra natal” a la cual regreso de manera idealizada para los fines de este proyecto, en donde se conjugan justamente mi experiencia, mis desplazamientos, mis memorias, tituladas: la “andada”. Es decir, unmovimiento de alternancia con los diferentes entornos y contextos vividos que experimenta el viajero, una propuesta que toma algunos elementos conceptuales y prácticos de la auto-etnografía (Artistikem, 2009), de conocimiento situado (Haraway, 1994), de memoria(Ricoeur, 2010), de reflexión y una praxisque conlleva la a la descripción del contexto social y cultural propio de mi tierra natal y mis recorridos como migrante. En suma, una posibilidad personal de seguimiento y desplazamiento a través de mis propias huellas y mi estar acá, pero además allá.
La transición de mi condición personal a campo de (IC)genera una serie de interconexiones con nuevos núcleos problémicos ligados unos a otros a manera de un gran tejido que adviene uno central llamado mi cuerpo, a semejanza a lo que algunos teóricos como Arturo Rico Bovio denominan corporeidad, y que en mi caso particular denominaré tejido.
La transición de mi condición personal de viajero residente en Bogotá al campo de Investigación-Creación, al espacio de la producción de conocimiento sobre el arte y mi propia identidad y práctica comoartista, ha generado una serie de interconexiones,tanto conceptuales como artísticas,traducidas en núcleos problémicos que se ligan unos a otros,formando un tejido que no es otra cosa que la misma “andada”, incluyendo todos los elementos, lugares, personas y objetos afectados por y desde ella. Por ello, emerge la necesidad de considerar sólo algunas conexiones. Entonces, he decidido quees la “condición corporal”, en el cuerpo en movimiento, en desplazamiento,pensada como un conjunto cohesionado detres dimensiones, la guía de mi exploración. A propósito, Arturo Rico Bovio(1998)explica:
"Las tres dimensiones del cuerpo dan luz acerca del desarrollo de la conciencia corporal y si bien es dudosa ontológicamente, sirve para señalar las fases de ese conocimiento. La primera es el cuerpo vivido, que despega desde la inconsciencia y los automatismos hasta llegar a la formación de de hábitos motrices y a la acumulación de información en la memoria. La segunda, el cuerpo percibido, la experiencia del otro en tanto semejante y diferente. La tercera es el cuerpo interpretado a nuestro juicio comienza a desde el reconocimiento del otro como humano, hasta su alienación"(Bovio, 1998, pág. 43)
La “Conciencia Corporal” en el desarrollo de este trabajo, forma parte de la sustentación de un cuerpo en virtud a una estática y a una dinámicaen relación a su desplazamiento y andada: véase el ejemplo de los viajes espirituales llevados a cabo por algunos médicos tradicionales de mi pueblo, los cuales solo son posibles cuando su cuerpo se encuentra en estado de quietud y reposo y permite al espíritu salir al encuentro con espiritualidades del bosque; la estática del cuerpo posibilita la dinámica del espíritu, una división que trasciende las fronteras del cuerpo y que a diferencia de la dualidad cristiana que separa lo uno de lo otro, aquí se presenta como un verdadero poder íntegro entre cuerpo-espíritu.
Lo anterior permite comprender que la condición que adhiere la andada como viajeno es solo de carácter corporal, sino también, de carácter sensible, vivencial, perceptual, relacional e integral, que afecta cada una de las tres dimensiones del cuerpo mencionadas por Bovio, y crea nuevas condiciones que emergen del cambio de dicho cambio de entorno en relación entre otros a factores climáticos, paisajísticos, culturales, etnográficos, arquitectónicos, culturales, gastronómicos, tecnológicos, y cuyas afecciones se traducen en de manera recíproca entre las personas, los objetos y el lugar de origen y los de destino, que son el punto de partida y el de llegada: la afectación del primero surge a través de la encarnación (experiencia, vivencia) del sujeto desplazado a la integridad de su lugar de origen; la del segundo lugar surge del dolor que causa la des-encarnación (nostalgia, desarraigo) de ese primer lugar; y la tercera es la cicatriz (huella imborrable) que mantiene al desplazado ligado y ligando sus dos mundos.
Tras su paso el viajero no se mueve ni se ve afectado de manera independiente por el mundo recorrido, pues también afecta y transforma, interfiere y se relaciona.
A partir de lo hasta ahora desarrollado he de decir que la andadapuedeabarcar tantas dimensiones como sea posible relacionar, desde mi condición diré quetejido al mundo he venido deambulando por sus confines como una hebra que tejeentornos, entendiendo mi condición de allá y de aquí, a través de todos mis viajes, en complejas conectividades que ni la decadencia de la carne podrá romper pues la partícula que le compone se transfigura por medio del paso(paso a paso se vive y se lucha) a lo intangible del fantasma.
El viaje,como acción corporaltambién encuentra interacción con la naturaleza, con lo intangible, con lo sensible, con lo comunitario y con las distintas condiciones que particularizan los lugares, las personas y las cosas.Interacción en la que no se presentan "ni actores ni espectadores"(Romero, 2012, pág. 233), sino relaciones conjuntasy recíprocas de un tejido, "el viajero (cuerpo dinámico) es para el lugareño (cuerpo estático) lo que el lugareño es para el viajero" (Jesús Holmes Muñoz, 2013), él lugareño ve pasar al viajero y el viajero ve al lugareño viéndole pasar, punto estático y punto dinámico dentro del viaje.
En el sentido de recorrido, el viajepuede ser pensado como experiencia de aprendizaje, de lectura del mundo (de haber pasado, de estar pasando y de aguardar)de marcar una huelladejándose marcar por el rocedel mundo recorrido y proyectando caminos nuevos. Así, el viaje se asimila a latridimensionalidad de la temporalidad que cita Paul Ricoeur de San Agustín en su texto: La memoria, la historia y el olvido (2010).La siguiente manera: "es el presente el que estalla en tres direcciones, reduplicándose de alguna manera cada vez: "Hay tres tiempos: pasado, presente y futuro" ahora bien, "el presente del pasado es la memoria; el presente del presente la visión (Contuitus) y el presente del futuro la espera". Usas mal las comillas: no sédónde empieza la cita y que es tuyo y que del autor. La tridimensionalidad así expresadapermite asociar el viaje no sólo a unacondición primordial de desplazamiento geográfico, sino a unaugurio de otro tipo de viajes:un nomadismo afectivo, subjetivo y espiritual.
Las condiciones anteriormente expuestas sobre la andada y su relación con la cita anterior permiten comprender a un viajero personificando el tiempo presente, estallando en tres direcciones, reduplicándose de alguna manera cada vez, donde su huella es su propio pasado (de haber pasado), su habitar su presente (de estar presente) y sus ojos puestos en el horizonte su futuro (de prever) los tres en el sentido de camino, andada y viajero.
Asociado a una interpolación de tiempos en un mismo instante y siguiendo el curso de estas ideas hace su aparición el rio de sucesos, el cual dentro del viaje ayuda a comprender metafóricamente la tridimensionalidad de la temporalidad dentro del desplazamiento como un caudal y un cauce proveniente de otros lugares y tiempos, presentándose y desapareciendo, viniendo de algún lugar, afectando y desapareciendo, dejando huellas.
La metáfora se gesta en mi trabajo a partir de un relato que un día recordé y compartí a mi amigo Gustavo Serrano sobre mis vivencias al lado del río Caquetá entre 1985-1988,cuando mis padres nos llevan a Puerto Guzmán Putumayo.Allí, junto con mi hermano Ricardo tuvimos la oportunidad de permanecer inmóviles por horas y horas concentrado en el letárgico movimiento de un cauce y a la espera de lo maravilloso, de lo que a nuestros anzuelos, sentidos y esperanzas de pescadores pudiera advenir.
La figura del pescador inmóvil a orilla del río,resultaimportantepara la comprensión de otra dimensión de la andada,en el sentido de que él constituye la representación de loestáticofrenteaun caudal que se mueve frente a él y le traspasa, pudiendo percibir desde dicha condición: el viaje comouna posibilidad de movimiento que genera ideas de un pasado (de desaparecer), un presente (de estar frente a su ojos) y un futro (de venir) dentro de una totalidad denominada rio.
Diré que la condición del pescador resulta muy semejante a la del viajeroaludido en este proyecto, valiéndose de la andadaysujeto a nuevas posiciones en tanto cuerpo que deambula,el viajero se emplaza, se desarraiga y habita,sale al encuentro de lo venidero, de lo probable, de lo improbable, de lo maravilloso, recorre, se presenta y desaparece, habita y deshabita, afecta y se ve afectado, deja huella; pero a diferencia del pesador, se sumerge a una condiciónde movimiento engranada a experiencias asociadas al dejar, al llegar, al emplazar, al ver, al sentir, al apropiar, al relacionarse y al esperar.
La andadase encuentra determinada por una serie de condicionamientos que permiten aludir experiencias de lo presente y lo ausente, de lo recordado y lo olvidado, de lo dejado y habitado en un amplio tejido compuesto por diferentes tipos de hebras entre el cuerpo y el mundo: unas fuertes y consistentes que permiten mantener conexiones vivas con cada elemento; otras elásticas que permiten movimiento y conexiones lejanas con lo dejado; otras volátiles con las que se fortalece los ausentes; otras afectivas que ligan las entrañas; otras vibrantes que se reacomodan y se reconstituyen conservando una conexiónprimordial y otras frágiles que van perdiendo su complexión y que terminan rotas dentro de la cartografía del olvido.